“¡Hasta siempre!”

“No es un adiós, es un hasta luego a una persona que sembró en su vida; que respetó y fue muy respetado”. Es una de las frases que se han pronunciado esta tarde en el sepelio de Antonio Fernández Fernández, patriarca de la saga de artistas unionenses Fernández, que ha acogido el Antiguo Mercado Público, lugar en el que ha protagonizado innumerables actuaciones con su guitarra.


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Antonio Fernández, quien falleció ayer a los 94 años de edad, ha sido nombre propio de la historia del flamenco tanto por su faceta como guitarrista de grandes cantaores (especialmente Pencho Cros) como por ser padre de la cantaora Encarnación Fernández, en el inicio de una saga de grandes artistas flamencos.

Una misa evangélica se ha desarrollado esta tarde en un sepelio cargado de emociones en el Mercado Antiguo, en el cual  se han habilitado 200 sillas y donde se ha cuidado de que en todo momento se cumplan las normas de seguridad sanitaria por el coronavirus. Entre los asistentes, además de familiares y amigos, se encontraban el alcalde, Pedro López, y algunos miembros del Gobierno municipal y del principal partido de la oposición.

A su conclusión, Antonio Fernández Fernández ha sido trasladado al cementerio de La Unión.


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