El maltrato animal en las macrogranjas italianas pone a Lidl en el punto de mira
El pasado octubre salió a la luz un reportaje de investigación realizado y publicado por la asociación italiana Essere Animali en colaboración con la ONG española Equalia. Con este reportaje, han quedado patentes los incumplimientos, en cuanto a materia de bienestar animal, producidos a lo largo de este año en explotaciones granjeras ubicadas en toda Italia.
Tan solo un día en una de estas granjas, relacionada como una de las principales proveedoras de carne de pollo de los hipermercados Lidl en Italia, ha servido para que los autores de esta investigación tuvieran pruebas para denunciar el maltrato a los animales, ya que muestran el incumplimiento de los protocolos y de la normativa en cuanto a bienestar animal.
Una campaña a nivel europeo contra los proveedores de carne de pollo de Lidl
La denuncia de la asociación italiana Essere Animali se suma a las de otras organizaciones, como las de la ONG española Equalia, en una campaña a nivel europeo contra la cadena de hipermercados alemana y sus proveedores, cuyos gerentes ya acumulan sanciones y denuncias por este tipo de delitos.
En las imágenes captadas en estas granjas, donde se encuentran más de un millón de pollos y otras aves de corral, se puede ver cómo los pollitos son lanzados desde alturas superiores a un metro, provocando aplastamientos entre los animales.
No es lo único que se muestra en este reportaje. Sin medidas algunas de control, los pollos muertos comparten espacio con los pollos vivos en las naves y algunos animales presentan torsiones no naturales en sus cuellos, algo que sin duda no ha dejado indiferente a las asociaciones animalistas.
Las cuestionadas técnicas de sacrificio empleadas en las macrogranjas
Otra de las grandes denuncias de las diferentes organizaciones tiene que ver con la fase de sacrificio de los pollos. Tal como muestran imágenes obtenidas en una de las mayores granjas de pollos de Europa, ubicada en Cologno al Serio, los trabajadores matan a los pollos sin seguir los procedimientos adecuados para este tipo de tareas.
Golpes contra objetos, aplastamientos de cuello o dislocaciones cervicales realizadas de forma manual, son solo algunas de las técnicas utilizadas por los empleados de las granjas, las cuales no garantizan en ninguno de los casos un sacrificio sin dolor.
Con esta iniciativa, que ha recibido ya el apoyo de más de 170 000 personas de toda Europa desde su lanzamiento el pasado mes de octubre, se busca perseguir y condenar el maltrato a los pollos en estas granjas. Otro de los propósitos principales de la campaña #LidlChickenScandal es que estas granjas se suscriban al Compromiso Europeo del Pollo (ECC).
El respeto de los protocolos, clave en la salubridad de los productos de alimentación
Con esta campaña, se pretende reducir el riesgo de transmisión de enfermedades zoonóticas, así como regular la cría de pollos de crecimiento rápido o broiler por los problemas de seguridad alimentaria que pueden provocar en los humanos.
De hecho, estos problemas derivaron en una alerta sanitaria que acabó este verano con la retirada por parte del Ministerio de Consumo de varios productos de Lidl, entre los que en España se incluía la Chistorra de Navarra, contaminada por la presencia de salmonela.