El 'minero de la cruz' y su veta de devoción

La imagen del Cristo de los Mineros ha vuelto a descender, por décimo primera vez en esta ocasión, en Vía Crucis desde la mina Agrupa Vicenta hasta la parroquia de la patrona de La Unión arropado por varios cientos de fieles, siendo hombros de buena parte de ellos sus 'pies'.



Fue en 2011 cuando se estrenó el primer descenso del 'camino de la cruz'. Desde entonces, se ha celebrado en 11 ocasiones, pues hubo tres años en blanco: 2020 y 2021 por el coronavirus y 2018 por la lluvia, la cual obligó en 2022 a cambiar de fecha. Sin embargo, pese a que es poco tiempo, la sensación es que el Vía Crucis se viene celebrando desde siempre, debido al fuerte arraigo que ha tenido un acto muy singular de esta tierra y que enlaza devoción con tradición.



Organiza la Real e Ilustre Cofradía del Cristo de los Mineros, participando sus integrantes y los de las diversas agrupaciones en llevar al Cristo, cuya imagen es la que está todo el año en la gruta-capilla de la sierra minera, siendo réplica exacta de la que se encuentra en el templo de Rosario. También meten el hombro la corporación municipal y los caballeros de Santa Bárbara, entre otros.



En el descenso, 14 estaciones marcan las paradas, las cuales corresponden a artísticas obras del artista local Esteban Bernal desde 2019. Esta vez no hubo cantos de saetas en el recorrido, como se incluyó en la anterior edición.

La iglesia de la Virgen del Rosario fue el punto de destino, teniendo lugar un oficio religioso y el hermanamiento de las agrupaciones del Cristo de los Mineros de La Unión y de Cartagena.

La actividad procesionista de cuaresma ya está plenamente activada y hoy, a las doce, toca presentar el cartel de la Semana Santa Minera'24.


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