Olvidados por la historia: deportados en Mauthausen
Republicanos españoles dan la bienvenida a las fuerzas aliadas (Mauthausen, 1945)
Buchenwald, Gusen, Hartheim… Aparentemente palabras irrelevantes, dispuestas al azar, difíciles de pronunciar para la mayoría de los hispanohablantes… Pero tras esas palabras de apariencia germánica, se esconden infinitas historias de sufrimiento, entre ellas las de veintiséis unionenses.
Veintiséis fueron los unionenses deportados a los campos de concentración alemanes durante el III Reich. En concreto, cinco vecinos de la localidad de Portmán y veintiuno de la ciudad de La Unión. Unionenses que tuvieron que sufrir las durísimas condiciones de los campos alemanes.
En torno a 7.532 fueron las personas de nacionalidad española deportadas al campo de concentración Mauthausen-Gusén, más conocido como ¨El campo de los españoles¨. De ellos, 420 eran vecinos de los diferentes pueblos de la región.
La mayoría eran republicanos que cruzaron la frontera con Francia, tras la caída de Cataluña, siendo movilizados por el ejército francés para luchar contra los nazis y cayeron prisioneros en 1940.
Estos ciudadanos fueron desposeídos de su nacionalidad española durante la dictadura franquista, pues Franco aseguró que no había españoles más allá de las fronteras. De ahí, que los republicanos fueran considerados como apátridas.
El sistema de campos de concentración nazi llegó a sumar centenares de campos, subcampos y dependencias derivadas. Mauthausen, Auschwitz-Birkenau, Dachau… son algunos de los campos más conocidos. Trabajos forzados al límite, condiciones de hambre, frío y palizas inimaginables, torturas de todo tipo para exprimir hasta el final a aquellos luchadores.
La mayoría de nuestros veintiséis valientes fallecieron durante el invierno de 1941. Debido al frío, muchos enfermaron y fueron exterminados porque no podían trabajar. El clima fue terrible y duro, con temperaturas de -25ºC a -29ºC. Las temperaturas agravaron más los efectos del hambre y las duras condiciones de trabajo que debían de soportar.
Desconocemos el destino de los cinco vecinos de la pedanía de Portmán, pues muchos documentos fueron destruidos por los nazis o continúan aun sin ser publicados. Los cinco fallecieron entre los años 1941 y 1942.
En cuanto a los vecinos de La Unión, cinco fueron deportados al campo de Mauthausen. Cuatro de ellos fueron liberados el 5 de mayo de 1945, día en que las fuerzas aliadas llegaron al campo. A Gusen fueron enviados cinco unionenses, falleciendo todos ellos.
Tres fueron deportados a Dachau, falleciendo uno de ellos a causa del despiadado trato al que eran sometidos. Andrés Campos Peralta falleció en el Castillo de Hartheim a causa de las cámaras de gas.
En Buchenwald, conocido por los terribles experimentos llevados a cabo, fueron deportados Luis Herrada y José Ramón Fernández. Finalmente, Fulgencio Tortosa fue enviado a Flossenbürg.
Solo ocho lograron sobrevivir a la pesadilla de los campos de concentración. El resto fallecieron o se desconoce su final. Estos datos convierten a La Unión el quinto pueblo de la región con más deportados a los campos de exterminio.
Veintiséis valientes que lucharon por la libertad y la justicia. Veintiséis luchadores que fueron condenados al olvido tanto por su país como por su pueblo. Veintiséis ciudadanos que esperan aun recibir el homenaje que se merecen.
