Bahía de Portman

                                   

"La cocina económica 'La Protectora' fue una iniciativa maravillosa"

Gonzalo Wandosell rescató en la conferencia ofrecida con motivo de la festividad de Santa Bárbara un capítulo casi olvidado y que, durante años, "salvó a muchos del hambre y de sus secuelas", expresó sobre la creación en 1893 de un servicio que llevó a cabo con enorme diligencia un equipo formado por personas de diversos partidos políticos liderado por el 'ilustrado' alcalde Jacinto Conesa, quien ocupó el cargo de regidor unionense hasta en 14 etapas diferentes.



Año 1893. La gran amenaza es la invasión del cólera, por lo que los gobernadores piden a a los municipios que adopten medidas ante su amenaza. En La Unión, según concluyen, buena parte del riesgo de contraer esta enfermedad se debe a la pobre calidad y nivel alimenticio de personas inmersas en una etapa de mucha pobreza. Jacinto Conesa García, el 'alcalde ilustrado de La Unión', forma el 6 de junio un equipo formado por personas de diferentes colores políticos para la misión de una cocina económica que permita que los pobres se alimenten con un mínimo de calidad y regularidad. Trece días después, mostrando una envidiable operatividad, las bases de lo que se iba a llamar 'La Protectora', por aquello de proteger a las personas, ya tenía sus bases y el 23 tiene lugar la junta de constitución.

Este relato está basado en la conferencia 'La cocina económica La Protectora' ofrecida por Gonzalo Wandosell Fernández de Bobadilla ayer, en el capítulo cultural de la celebración de Santa Bárbara por parte de la Orden de los Caballeros de Santa Bárbara.  

El cronista oficial de La Unión, como es habitual, supo ganarse en todo momento el interés del espectador a base de orden y concreción, con esquemas que situaban el hecho histórico en la época en que se produjo y con relatos breves y bien estructurados, con pequeños apuntes paralelos que, por su valor histórico o anecdótico, aumentan el interés del oyente. Además, todo contado en un tiempo reducido, ajustándose a eso de 'Lo breve y bueno...'. En este caso le costó, "porque 'La Protectora' tiene mucho que contar y estoy pensando en escribir un libro, pues fue algo maravilloso que salvó a muchos del hambre y de sus secuelas", expresó.


Sigamos con la narración condensada sobre aquella brillante idea que capitaneó una persona no nacida en La Unión (lo hizo en San Pedro del Pinatar) y que hizo mucho por esta tierra en las 14 ocasiones en que ocupó la alcaldía entre 1890 y 1909, siendo nombrado 'Hijo adoptivo y predilecto' de La Unión. Su validez le llevó después a las Cortes Generales y a ser gobernador civil en Córdoba y en Zaragoza.

Importante fue en el enraizamiento de la entonces novedosa solidaridad gastronómico que todas las personas pudientes de La Unión se volcaron ayudando. El precio de los menús se fijaron en 10 céntimos, 5 menos que costaban en Murcia.

La inauguración tuvo lugar el 8 de octubre de 1893 en un inmueble ubicado en la plaza Bilbao de la calle del Arco, cerca del actual centro cívico 'Asensio Sáez', espacio que más tarde ocuparía. En esa puesta de largo se repartieron 1.255 raciones que fueron costeadas por el alcalde. Al día siguiente, la misma cifra, entonces pagadas por un empresario taurino.

Cuando Jacinto Conesa dejó el cargo (en una de sus retiradas como primer edil), se resintió la cocina económica, siendo reactivada por otro alcalde, Jose Maestre, y Pío Wandosell (bisabuelo del conferenciante), aumentando ese impulso el regreso de Conesa y el estreno del nuevo local en 1891. En 1924 cerró la cocina económica 'La Protectora', que después tuvo como servicios similares 'Las cantinas escolares' en 1931, 'La cocina popular' en 1936 y en 'El auxilio social' en 1939. Por cierto, en una de ellas fue clave Antonio Ros Sáez, quien da nombre al salón donde se celebró la conferencia.

PD. Gonzalo Wandosell aclaró que 'La Protectora' de la cocina económica es ajena a la asociación que años más tarde se instaló en El Garbanzal con el mismo nombre.  

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