Belleza que protege: por qué el maquillaje con protección UV es el aliado del verano
Con la llegada del buen tiempo, el sol se convierte en el protagonista de nuestras jornadas al aire libre. Y aunque es una fuente natural de energía y vitamina D, también puede convertirse en uno de los principales enemigos de la piel si no la cuidamos como toca.
En ese punto, la cosmética ha dado un paso más y ha creado un híbrido imbatible: el Maquillaje con protección UV, capaz de embellecer mientras cuida. Una fórmula doble que gana terreno no solo en verano, sino durante todo el año.
No es solo cuestión estética: protegerse es vital
Todavía hay quien piensa que con aplicar protección solar al ir a la playa es suficiente. Pero lo cierto es que los rayos UVA y UVB no entienden de horarios ni de estaciones. Paseos por la ciudad, la luz que entra por la ventana mientras trabajas o simplemente conducir… todo suma. Y lo más preocupante: el daño solar no siempre se nota a simple vista, pero sí deja huella a largo plazo.
El maquillaje con filtro solar responde a esa necesidad de estar protegidas incluso en nuestra rutina diaria, sin tener que renunciar a un acabado bonito y natural. Se adapta a cualquier tipo de piel, a cualquier estilo y —lo más importante— ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro, las manchas y el riesgo de enfermedades dermatológicas.
¿Qué diferencia hay entre un maquillaje normal y uno con protección?
La clave está en el escudo invisible que ofrece. Mientras una base de maquillaje convencional cubre imperfecciones, un producto con protección solar va un paso más allá. Integra ingredientes que actúan como barrera frente a los rayos solares, algunos incluso con activos antioxidantes que combaten los radicales libres.
Hay formatos para todos los gustos: desde BB creams ligeras con SPF15 hasta fondos más cubrientes con protección alta, ideales para pieles claras o sensibles. Y como no todas las pieles reaccionan igual, también puedes encontrar versiones específicas para piel grasa, seca, mixta o con tendencia acneica.
Cómo elegir el maquillaje con protección adecuado
A la hora de hacer tu elección, conviene tener en cuenta algunos factores. No es lo mismo buscar un producto para usar a diario en la oficina que uno pensado para un día de campo. Aquí van algunas claves:
- Nivel de protección solar: si vas a estar expuesta muchas horas al aire libre, elige un SPF 30 o superior.
- Textura: las fórmulas ligeras tipo mousse o fluido suelen ser más cómodas en climas cálidos.
- Tipo de piel: si tienes tendencia a los brillos, busca acabados mate o libres de aceites. Para pieles secas, lo ideal es optar por fórmulas hidratantes.
- Resistencia al agua: imprescindible si lo vas a usar en días de piscina o playa.
Un truco que nunca falla es fijarte en la etiqueta. Cada vez más marcas incluyen información clara sobre el espectro de protección, duración y compatibilidad con otros productos.
Cada pequeño gesto cuenta. Y si puedes lucir una piel radiante mientras te proteges de los efectos nocivos del sol, ¿por qué no hacerlo?