Proponen que una vía pública lleve el nombre de Maruja Vicente

La solicitud ha sido presentada hoy en el registro municipal de La Unión por Antonio Gómez, un perfecto conocedor de esta tierra y sus gentes, quien ha expuesto en el escrito los numerosos motivos que reúne para que una calle pase a denominarse ‘Artesana María Vicente’, tanto por sus aportaciones al municipio como el cariño que se ha ganado de los vecinos. En la imagen se la observa en 2010, cuando fue nombrada ‘Dama honoraria’, delante del emblema con el escudo de La Unión que ella elaboró y que luce en el salón de actos del Ayuntamiento.



Antonio Gómez Pérez, en el escrito remitido al consistorio, expone:

"Que a fin de galardonar los méritos, virtudes, cualidades demostradas por Da. María Vicente Caparrós, y en virtud de todos los esfuerzos y toda una vida entregada con mucho amor al municipio que la viera nacer, adjunto un explicación razonada por cuanto al final será motivo de solicitud:

De familia humilde, María, Maruja Vicente como es conocida en la actualidad por los unionenses, nace en La Unión. Desde temprana edad, con siete años, es acogida en la ‘Sección Femenina’ donde comenzaría a formarse en el mundo del bordado siendo su maestra Encarna Sánchez. La dirección de la Sección entonces la conducía María Cegarra y su ubicación, los bajos de la Casa del Piñón. Durante este tiempo y hasta la adolescencia, María Vicente es alumna aventajada, destaca por sus actitudes como bordadora, ganándose su reputación y a la vez los encargos, muchos de ellos del ayuntamiento de la localidad; nacen sus primeros contactos con el organismo local.

Formada como bordadora, a sus veintiún años, decide contraer matrimonio con Cristóbal y formar su primer hogar en la calle Tejera. Del matrimonio nacen cuatro hijos varones. Afrontar la realidad suponía ponerse manos a la obra, el sueldo de un minero no daba para sufragar gastos y pronto el salón comedor, cocina u otra dependencia de la casa era espacio propicio, ahora como maestra, para enseñar a coser y bordar a sus alumnas, academia – hogar que se viera, nunca mejor dicho, desbordada. Con el tiempo nuevos locales en alquiler suplieron al hogar siendo último la cochera de la calle San Vicente en donde Cristóbal, ahora ya trabajador de Refinería, rotula con las iniciales el nombre de su esposa, M V (Maruja Vicente), último taller con mucha historia en el recuerdo.

La actividad de su marido cambia, ahora es trabajador de la empresa ‘Refinería de Petróleos de Escombreras S.A.’ La situación le permite optar a una de las cuarenta viviendas de Renta Limitada Subvencionadas que con fecha 9 de diciembre de 1970, la Comisión Municipal Permanente del Ayuntamiento de La Unión aprobara con la concesión de licencia de obras en terrenos de la propiedad de la empresa, sitos en la entonces calle José Antonio s/n. En 1973, María y su familia marchan a vivir al Grupo de Repesa dándose nombre a las dos vías años más tarde: calles Río Segura y Río Guadalentín. Desde entonces, en el número 1, de Río Segura sería lugar donde se generaran muchos proyectos y salieran grandes trabajos.

En todo este tiempo, casi media vida, el trabajo y su condición de unionense fueron de la mano. Sus contactos con Asensio Saez, Paco Conesa y otros unionenses ilustres le hacen integrarse en el tejido cultural de la ciudad, participando activamente. La terraza Mery en donde se celebraran las primeras ediciones del Festival del Cante de las Minas sería escenario de sus trabajos bajo la dirección de los artistas pictóricos y escenográficos del momento.

En 1982 Maruja Vicente es reconocida por su trabajo encomiable por la Asociación Cultural Mesa Café de La Unión , siendo nombrada ‘Popular de La Unión’

En 1992 , recién creada la Asociación Cultural de La Unión, tras un largo paréntesis sin procesiones, vuelven a salir a la calle; Maruja Vicente se responsabilizaría de procesionar a La Dolorosa ese año.

En todo este apogeo cultural unionense, la recuperación de las tradiciones y el folclore persiguen a la bordadora con denominación de artesana. Impulsa el Grupo Folclórico Ciudad de La Unión. Maruja hizo reaparecer, reproducir el dibujo con la cenefa del refajo del traje minero, que prácticamente había desaparecido, a través de un fragmento muy deteriorado, reproduciendo la grafía del ornato. Trajes mineros sencillos con una cenefa que los hacía destacar por su singularidad. Su experiencia y profesionalidad la hacen integrarse en el Gremio de Artesanos de la Región de Murcia siendo representante por La Unión.

El año 1994 marca un antes y un después en su vida: el comienzo del bordado del manto de la Virgen Dolorosa de la obra de Conesa y el fallecimiento de su hijo Gonzalo. A día de hoy las lágrimas no se han secado, el recuerdo es permanente. Quizá fuera la fe en la Virgen y los apoyos de su gente quienes la impregnaron de ese cariño que hoy sigue manteniendo. Cuatro años de costoso trabajo, de lágrimas e hilos de oro que culminaron en 1998 para vestir a La Madre Dolorosa en la Semana Santa de ese año. Hermosa obra de arte, con boceto de Asensio Sáez y Sergio Celdrán que hicieran que siguiera trabajando dirigiendo el arduo trabajo y a las bordadoras: Conchita Ortiz, Eloisa López y Mercedes Martínez.

En 1998 es homenajeada por el Excmo. Ayuntamiento de La Unión coincidiendo con la ‘III Semana de la Mujer’.

Conocida es también su faceta solidaria y de colaboración con entidades no gubernamentales. En 2009 formó parte de la Junta de Gobierno de la Asamblea Local de Cruz Roja de La Unión siendo presidente Ramón Gijón Martínez. En su aportación al voluntariado, Cruz Roja La Unión, la homenajeó en marzo de 2020.

Coincidiendo con el ciento cincuenta aniversario de la creación del municipio de La Unión en 2010 fue distinguida con el reconocimiento de ‘Dama Honoraria’

Banderines, escudos, corbatines, bandas, fajines...a Maruja no hay diseño e hilos que se le resistan; quizá el último que bordó en el sentido más amplio de la palabra fue para la entrega al alcalde de la ciudad hermana de Peñarroya Pueblonuevo y en la que tuviera también su protagonismo, felicitación en el Salón de Actos de la Casa del Piñón y en tierras andaluzas que conociera con motivo del acto en 2018.

...Grande y dilatada es la huella de una gran mujer, y coraje , querida en un municipio al que sirvió, sirve toda una vida, fuera quién fuera el regidor; a todos atendió y todos con ella contaron. Virtuosa del bordado, persona imprescindible en las manifestaciones culturales, festivas y religiosas. Sin Maruja Vicente no se pueden entender la Fiestas del Rosario; es la mejor artesana en protocolo para compartir con la Corte de Honor los momentos especiales de la fiesta y su saber estar... Esta mujer tiene nombre de María y de los unionenses, de Maruja Vicente Caparrós".

Para concluir, Antonio Gómez, en base a dichos motivos, solicita que el Ayuntamiento acuerde que una calle del municipio se denomine ‘Artesana María Vicente’, planteando como posibilidad que fuera una vía que coincida con la calle Río Segura, donde actualmente reside, y en su defecto, que se estudie cambiar el nombre de la calle San Vicente por la denominación planteada.

 

Imprimir Correo electrónico